Izkin... Capítulo 32 Recargan fuerzas los “malos”

-Oye Homer.
-Sí, Barney.
-Me parece haber oído algo allí al fondo.
-No digas tonterías.
Homer y Barney eran mecánicos, se habían internado en el laberinto de espejos para colocar una serie de espejos que faltaban y reparar la atracción. Pero…
-¿Que es esto?
Una serie de tela de araña manchada en sangre estaba toda tirada en mitad del suelo.
Mierda siempre se me olvida que la lectura no tiene banda sonora, estaría bien que en ese momento se escuchara un ruido tipo “¡chin-chan-chooooon!”. Ya sabéis ese que indica que algo gordo a pasado, en nuestro caso, ambos se liberaron, Kilinka y Rutax escaparon del hambre, sed y la tela de araña de Bu. ¿Que paso? Mejor que no lo sepáis. Solo fue cosas del tipo que Kilinka es muy flexible y con un poco de hombros dislocados de Rutax pues se escaparon, vaya… que cagada, os quería dejar con la mosca pero nada de nada. Que decir que pese a esa pedazo habilidades escapistas muy dolorosas no alcanzaron a Izkin y amigos en el hospital pues se habían largado de ahí la mañana de aquel mismo día y habían perdido todo rastro.
-Mierda que el jefe no se entere de la mala noticia.
-¿Qué mala noticia?-La voz de Txoribueno acojono a Rutax y Kilinka.
-¿Eh, que? A si, que no tienen tu helado favorito en el parque.
-Se os han escapado, ¿Verdad?-lo dijo en un susurro.
-Si.
-Os envío a Obas, van camino del camiño flipiño. Como falléis os meteré a los tres con mi mascota Mixi.
-No puede ser peligrosa una mascota llamada Mixi.-Comento Kilinka.
-Mixi es una pitón de 100metros… mejor será que no te abrace, es capaz de aplastar una barra de pan de hace 1 mes.
Al momento a su lado se tele transportó Obas. ¿Como es posible? Yo que se, pensar un poco vosotros, ¿no? Que se escritor es muy jodido que hay que pensar todo para que no quede ningún fallo, digamos magia sí así os sentís mejor, o un aparato hipermegachuli chachiguachi que Txoribueno hubiera inventado. Vosotros veréis, pero una cosa, la habilidad es para llevar personas de su sitio delante de él a otro sitio y nunca al revés.
Pues ahí apareció todo serio Obas.
-Hola- dijo secamente.
-¿No te creerás el jefe verdad?- Le dijo Rutax.
-No.
-Muy bien pues vamos por aquí.
-El sur está al otro lado.-Secamente lo dijo Obas.
-No jodido hombre molusco, el norte está hacia aquí, ¿es que no ves por donde se está ocultando el sol?
Obas se calló aunque no hablaba mucho, eso sí se puso tan rojo como un cangrejo, de ahí lo de hombre molusco…
-Nos llevan medio día de ventaja y esta vez será un tres para tres, sabemos como actúan y estamos cabreados. Estaremos algo jodidos pero ellos también y seguramente descansen ahora un poco, nosotros saldremos a por ellos a toda velocidad y les cazaremos, les daremos una paliza, nos desahogaremos, les torturaré, les… ¡PAF!
-Vale hombre que te habías atascado.-Sopapo de Kilinka a Rutax.
-De acuerdo, pero de esta no se libran, nos vengaremos de esos hijos de ser vil, pues no nos quitaran… ¡la libertaaaaad! De dar una paliza al que se la merece.