miércoles, 29 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 22: Txori and company

Y ahí estaban, completamente calados, todos miraban la puerta de rejas esa de acero. Izkin estaba muy serio, el melocotón que le produjo ese sueño a Iren les salvó la vida y conocieron parte de Txoribueno. Parte, sí parte joder, que el tío con lo importante que es no se va presentar a la primera delante de Izkin y compañía, aunque es verdad que ha quedado con un maleducado de cojones.
-¿Cómo lo sabías Iren?
-Fue el melocotón, soñé como morimos los tres ahí dentro, Bu se electrocutaba con la puerta y tú y yo nos caíamos. Lo que no sabía que ese era alguien poseído por Txoribueno. 
-Da un poco de miedo, eso de poder poseer a la gente, ¿No creéis?- Comentó Bu lo que realmente todos pensaban.
-De todas formas me busca y yo Izkin Jota Astra le daré la camorra que busca. –OH..., increíble Izkin. Vaya mala ostia y vaya confianza que da el tío. Hombre por algo el es prota y no el hombre de broma.-Por cierto, ¿y si lo dejamos pasar?- Me cago en… jodido cobarde, normal que le sacudiera luego Iren un par de ostias.
Aprovechando que la tormenta pasaba y volvía el sol se pusieron en camino antes de que acabara siendo de noche, discutiendo de por que le había sacudido que era una broma y tal, mientras que Iren le gritaba más y Bu suspiraba. Y ahora nos vamos muy lejos de ahí, nada más y nada menos que al castillo de Mumbatu, así nos damos un respiro de Izkin e Iren y hacemos cosas típicas de historias, conocer al malo y parte de sus intenciones.
Txoribueno estaba en un pedazo sillón con relax, giratorio de cuero negro. En una habitación de piedra bien grande, en el había una alfombra persa con pinta de cara, una chimenea con pinta maligna y lo mismo del escritorio que tenía delante con multitud de cachivaches extraños. En frente a él estaba un personaje de mediana estatura de pelo moreno con rizos y con pinta de moro que…
-¿Odirobas, donde está nuestro huésped?-Pregunto a ese ser Txoribueno. 
-Mi señor, el cautivo Mumbatu lo tenemos en la celda 7G. ¿Ha conocido al muchacho?
-Sí Obas, sí. El supuesto muchacho al que no podré cazar. No parece gran cosa la verdad pero por ahora se me ha escapado y no me hace mucha gracia la verdad. 
-Seguro que ha sido suerte, señor.-El pelota de Odirobas.
-Sí, tiene pinta que el melocotonero cabrón ese les ha ayudado un poco, cuando me los encontré estaban cerca. Por lo que se, se dirigen hacia aquí como dijo el mamón de Mumbatu, pero están aún muy lejos. Creo que se dirigen al parque arana. Anda, llama a Oirutas para que se presente delante de mí.
-Señor, sí señor.
Odirobas, Oirutas… vaya nombres pero tienen pinta por si no os habíais dado cuenta que son los esbirros de Txoribueno. Bueno pues el tal virutas o como se llame que era más bien chiquitajo aunque con buena apariencia…
-Que tal jefe, ¿Qué se le ofrece?
-Hombre Rutax, mi sicario favorito, verás, he encontrado al tal Izkin del que hablaba Mumbatu.
-¿Izkin?, ¿el capullo que te iba a dar a gusto?
-Sí, el mismo, y está acompañado- ¡Flash! Y en la mano apareció una foto de nuestro trío favorito, después de Gibson, Glover y Pesci claro, y se la dio a Oirutas- se dirigen al parque arana, anda dales un saludo de mi parte.
-Umm, pedazo chavala y… mierda jefe las arañas me dan asco joder, ¿no querrás que te los traiga a todos no?
-No, puedes hacer con ellos lo que te plazca pero Izkin para acá de cabeza, ¿capichi?

domingo, 26 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 21: Dejuví segunda parte.

-No nada, vamos a donde nos invita el buen hombre.
El hombre les empezó a guiar e Iren esta vez sin ninguna duda le vio esa sonrisa de hijo puta que vio en su sueño y se acordó de todo.
La lluvia seguía con saña entonces:
-Oiga, ¿Falta mucho?
-Casi hemos llegado.
Y entonces se veía el árbol millón-años y el agujero que estaba en su base.
-Es ahí en ese agujero que pasado de generación en generación en mi familia.-Comento el hombre
-Vaya herencia rara, ¿no?
Iren se aventuró hacer la pregunta que confirmaría sus sospechas.
-Pero no podían haber construido su casa en aquel árbol, tiene un tronco tan ancho que casi ni lo notaría.
Entonces el hombre le miro con esa mirada profunda y le empezó a hablarla, solo había una cosa diferente, Iren esta vez sabía perfectamente que tenía que hacer y para empezar le sostuvo perfectamente la mirada.
-¿Acaso os he dicho que eso es mi casa? El árbol también ha pasado de generación en generación, es como parte de mi familia.
Y se metieron en el agujero pero, Iren paró a sus amigos les mando callar con la mirada y cuando el hombre se giró para ver por que no les seguían, Iren le arreó una patada al puro estilo de Chuck Norris. El hombre cayó de espaldas en el interior de la cueva e Iren acciono la palanca y le dejo encerrado ahí dentro.
-¡Pero que haces! ¡Te has vuelto loca! ¡Él solo nos estaba ayudando!
-¡CALLAOS LOS DOS! ¡Y NO TOQUEIS LA PUERTA DE ACERO!
Izkin y Bu retrocedieron.
-Así que el amigable señor nos quería encerrar aquí para que el árbol enorme nos devore, ¿me equivoco?
-Que tonterías dices Iren- Le espetó Izkin.
-Cállate y fíjate bien.
Entonces amigos y enemigos lectores algo raro paso, el hombre empezó a reír tan fuerte que hacía temblar la cueva. Lo más jodido era que ni pa dios era su voz y esos ojos, de un verde intensísimos, antes no los tenía.
-Me has descubierto, no se como pero así es.- La voz del tío no era profunda, era mucho más suave, tranquila y amenazadora a la vez, y mirando a Izkin directamente se sujetó a la puerta de acero, se veía casi la corriente como pasaba por su cuerpo pero el tío miraba a Izkin con una sonrisa y dijo.
-Izkin J. Astra, has hecho buenos amigos aquí pero te cazaré.
Claro acojonado estaba Izkin, quien no lo estaría, ¿Chuck Norris? 
-¿Quien coño eres tío, y por que cojones sabes mi nombre?-todo acojonado Izkin
-Este tío no tengo ni idea quien es. Pero el que te está hablando es el PODEROSO TXORIBUENO, ¡WAJAJAJAJA! De está te has escapado Izkin J. Astra pero mis garras llegan muy lejos, tu bella amiga será mi esclava y ese monstruo me servirá para hacerme un abrigo. ¡WAJAJAJAJA!
PLAFT
Izkin le dio un puñetazo al tío y cayó a la raíz ardiente, a Izkin ni le dio calambre ni nada aunque le dolía la mano.
-¿Pero estás loco? Podríamos haberle interrogado por que esta tan interesado en ti.
-¿Y eso importa? Voy a ir a donde él y le voy a dar tal somanta de ostias que querrá ser en realidad el pavo al quien había poseído.

miércoles, 22 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 20: Dejuví

-¡Iren, Iren, despierta!
Iren abrió los ojos y estaba Izkin y Bu mirándolos muy preocupados además una persona de blanco los acompañaba y la examinaba. 
-¿Qué, que ha pasado?
-¿No te acuerdas? Derrotamos a las cerdas mariconas de mierda, superamos el volcán y lo descendimos hasta aquí. Pasaste del cartel y te comiste un melocotón y derrepente perdiste el conocimiento.
-¿Perdí el conocimiento?- Entonces cayó, el tipo de blanco era uno de los que le disparaban, se puso a la defensiva y…
-¿Pero Iren que haces? ¿Por que quieres pegar al doctor Epi?
-¿El doctor Epi?
Entonces le contaron lo que paso. Iren se trago el melocotón, entonces entro en un shock, el doctor Epi vigilaba la zona por que sabía que el melocotón tenía un fuerte impacto sobre los seres humanos. Cuando los vio fue corriendo a donde ellos pero ya era tarde e Iren había comido uno, entonces se fue corriendo a su especie de chavola que tenía y se trajo algo como un antídoto, Iren se tranquilizó entonces aunque seguía inconsciente. Hasta que un buen rato después volvió a sacudirse violentamente pero esta vez se despertó.
-¡Para que está entonces ese árbol! Pienso talarlo ahora mismo.-Dijo Iren enfadada.
-¡PARA!- le grito Epi- es un melocotonero que puede matar al que come su fruta pero si no te mata te da algo a cambio. Tú sabrás que te ha dado. Ningún humano puede comerse un melocotón sin sufrir un shock. Pero del resto de seres de este mágico mundo algunos lo consiguen aguantar. El 50% de los humanos mueren al comer la fruta, el 49 % recibe como regalo una información sin importancia y el 1% información vital. Tú sabrás que has soñado pero no era nada cómodo viendo como te sacudías.
Vaya chapa del doc. Epi, lo peor era que Iren no se acordaba ni ostias del sueño, tu lector supongo que sí sino deja la bebida y vete al médico.
Se despidieron de él y siguieron su camino con calma, salieron del bosque y un enorme prado había delante de ellos.
-¿Por aquí no hemos pasado?-Pregunto Iren.
-No, acabamos de superar un monte peligroso- Le dijo Bu.
-No me suena en nuestro camino haber superado un sitio tan tranquilo, ni siquiera se ven las pelotas que tanto te asustan, no se si eso es malo.-Palabras con sentido de Izkin.
-Pues no sé.
Poco después empezó a llover, primero poco y luego con saña hasta que apareció la tormenta y Bu empezó a dar saltos de terror con cada relámpago. Buscaban algún sitio para refugiarse pero ahí no había nada hasta que vieron a un hombre con un burro y una lámpara.
-Parece que estáis en problemas.-Lo dijo con voz grave casi como un susurro. 
-Pues sí pero a no ser que vendas canoas no nos interesa nada que parece que esto se va a inundar.
-Conozco un sitio donde os podréis resguardar de la lluvia.
-No jodas pues vamos.
-No Izkin espera, ¿oiga por que nos quiere ayudar?
-Yo voy hacia allí también, tenemos sitio de sobra para nosotros tres y esa bestia que lleváis con vosotros. Además suele dar buen karma ayudar a la gente a cambio de nada y se sienta bien.
-¿Qué?- e Iren puso una cara rara.
-Oye Iren ¿te pasa algo?

domingo, 19 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 19: La cueva

Llovía con saña, cada rayo que caía daba un salto aterrado la pobre araña, y para colmo se empezaba a encharcar el prado, ¿donde coño les quería llevar ese hombre?
-Oiga, ¿Falta mucho?
-Casi hemos llegado.
“Si ya eso dijiste hace media hora” pensó Izkin pero esta vez era cierto. A lo lejos se veía como un agujero con escaleras, parecía más un metro que otra cosa. Pero lo más impresionante era el árbol que había al lado del agujero, mira que en varios kilómetros a la redonda no había un solo árbol salvo ese pero mediría cerca de 100 metros. Y sí, los rayos le daban pero era tan ancho además y tan sólido que no le hacía nada de nada.
-Oiga, ¿que es en el agujero?-Pregunto Iren
-Sí, ha sido un agujero pasado de generación en generación en mi familia.
-Vaya herencia rara, ¿no?
-Ssshhhii, calla Izkin- Le silenció Iren a su amigo.
-Pero no podían haber construido su casa en aquel árbol, tiene un tronco tan ancho que casi ni lo notaría.-Le dijo Iren
El hombre sombrío le miró profundamente y le dijo:
-¿Acaso os he dicho que eso es mi casa? El árbol también ha pasado de generación en generación, es como parte de mi familia.
La verdad que esas palabras acojonaron a Iren un poco, bueno las palabras no, sino la forma de decirlo con esa mirada penetrante que acojonaría al mismísimo Chuck Norris.
Y entraron en la especie de parada de metro y dejaron de calarse en la cabeza por que con la que caía el agua entraba al agujero como un río pero en seguida se desvió por un río subterráneo. Era un poco acogedor el lugar, había antorchas que poco a poco fue encendiendo aquel hombre torpemente incluso un fuego y se quedo sentado mirándolos.
-Antes comentaste que esto no es tu casa, entonces que es.
La volvió a mirar fijamente y dijo…
-Efectivamente, esto no es mi casa, es un sitio donde guardo cosas.
Y se levanto y empezó andar poco a poco mientras decía.
-Si, es un sitio útil, ideal para un día como este.
Parte de razón tiene que llovía con ganas. Pero entonces el hombre que poco a poco como si paseara llego a la salida le dio a una especie de palanca y una puerta de rejas de acero les encerró dentro de ese agujero, el hombre estaba fuera con una sonrisa burlona e hijo de puta que daban ganas de romperla de un puñetazo.
-Mierda colega, ¿pero que haces?- Dijo Izkin.
-Tú, debes de morir. Serás tragado por el árbol millón-años.- Y el tío desapareció.
-Mierda Bu ¿tú no puedes romper las rejas?
-Lo intentare Izkin.
Y al tocar las rejas una descarga eléctrica sacudió a la araña y cayó en el acto, el suelo de debajo suyo se iba abriendo poco a poco y en el fondo había una raíz enorme supongo que del árbol que también se estaba abriendo. Cuando se abrió la raíz había una especie de río de lava en él, parece que al árbol, le gustaban las cosas calentitas.
-¡¡Mierda Iren como vamos a salir de aquí!!
-Yo que se, o viene Ur o me da que esta no la contamos.
-¿Como va venir Ur? Si sería un superhéroe de ese bosque, además la reja esta electrificada no puede hacer nada.
A lo tonto mientras pensaban que hacer, Bu inconsciente caía hacia esas raíces ardientes que por cierto iban ascendiendo y cada vez hacía más calor y subía y el ambiente se calentaba, el fin de nuestros héroes, “¿aquí acaba mi vida?” se pregunto Iren y cayeron a la raíz ardiente.

miércoles, 15 de abril de 2009

Izkin... Capitulo 18: El melocotonero.

-Venga Izkin date más prisa que estás como dormido.-Le comentaba Iren.
Y es que si no os acordáis, Izkin chinchó a Iren y esta le dio un ostión y lo dejó K.O. El asunto ahora estaba que descendían la montaña-volcán y claro Izkin que estaba medio grogui iba bastante lento hasta que se tropezó con una roca y entonces… entonces Bu le echó una telaraña para que no se despeñara. 
Otro bosque cerrado delante de sus narices, pero no era un bosque raro de superhéroes, no este era normalillo, con sus fieras comiéndose entre ellos con muchos insectos, árboles, etc. En medio de un claro pequeño pero suficiente para que entrara la luz del sol con fuerza había un melocotonero en medio con un buen puñado de melocotones. 
-Por fin un poco de fruta, ya vale de esa dieta de carne de cerdo que llevamos siguiendo desde el capítulo 11.-E Iren cogió un melocotón y se lo zampó en tres mordiscos pero…
-Iren, deberías de leer esto, pone ”¡Peligro! Esta fruta puede ocasionar la muerte”.
-Eso son tonterías de algún listo para que nadie más coma menos él del melocotonero, ¿Seguro que no queréis? Está de muerte-Lo dijo comiéndose otro melocotón.
-No, no, yo paso- Comentaron al unísono Izkin y Bu.
Y claro los carteles están para algo y no para pasar de ellos, así que derrepente aparecieron de la nada una gente completamente de blanco disparándoles mientras decían:
-El fruto sagrado, ¡Habéis comido del árbol prohibido!
Nuestros protagonistas salieron por patas por que parecía que les diera igual que solo 1 de ellos había profanado el árbol.
-Joder Iren, mira que te lo hemos dicho, ahora mira a correr con la de cerdo que hemos comido, a mi ya me duele el pecho.
Y la cosa se complico un poco más aún. Empezó a caer el diluvio con fuerza. Haber los que habéis leído hasta aquí y piense que estoy escribiendo cosas de la biblia que se dejen de tonterías, el melocotonero era de un rey y si llueve mucho que cojones queréis que os ponga. 
Pues nada que llovía con ganas y les perseguían gente armada, el bosque que protegía un poco de la lluvia se quedaba atrás y estaban en una zona sin árboles ni rocas ni nada, era una llanura que simplemente era un prado enorme. Seguían corriendo y empezó la tormenta, rayos por todos lados, Bu estaba acojonado, y de la nada, apareció un hombre con un burro y una lámpara con un impermeable, iba mirando al suelo pero alzó la mirada y les vio. 
-Parece que estáis en problemas.-Lo dijo con voz grave casi como un susurro. 
-Pues sí pero a no ser que vendas canoas no nos interesa nada que parece que esto se va a inundar.
-Conozco un sitio donde os podréis resguardar de la lluvia.
-No jodas pues vamos.
-No Izkin espera, ¿oiga por que nos quiere ayudar?
-Yo voy hacia allí también, tenemos sitio de sobra para nosotros tres y esa bestia que lleváis con vosotros. Además suele dar buen karma ayudar a la gente a cambio de nada y se sienta bien.
-Oye Iren vamos con él, además así nos podemos quitar a los tíos esos de encima.
-Si Iren, Izkin tiene razón. Aprovechemos este golpe de suerte.
-Venga vale vayamos- Claro que Iren no se fiaba en exceso de ese hombre, la buena fe era algo que escaseaba en ese mundo además le pareció ver que sonreía malvadamente cuando aceptaron, pero que salida tenían. Si se quedaban podrían coger una pulmonía si los otros no les acribillaban antes. Así que fueron con el.

domingo, 12 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 17: El volcán y ninguna parte

Y por fin, después de … joder cuantos capítulos, desde el capítulo 11, llevan subiendo el cochino monte y de tanto subir también les subió el colesterol, que de tanto zampar cerdo se pusieron muy fondones, sobre todo Izkin que en vez de Izkin parecía Zikin (sucio en euskera).
La sorpresa era que el monte, no era monte –era una montaña- ¡Quien ha sido!, me cago en todo lo que se menea, has sido tú, ¿no? Cuidadín López que te vigilo. Y no, no era una montaña, era un… ¡VOLCAN! 
-Joder Izkin ya te vale, menudo tufo sueltas- Le comento Iren cerca del cráter.
-Perdona pero es el cerdo, me ha dejado la barriga echa polvo-Comento Izkin, por cierto me tenéis muy enfadado, seguro que pensabais que iba a soltar el chiste de Shrek, ¿no? No mentáis que os he cazado, la próxima vez escribir vosotros el capítulo, mamones. 
-Esperar un poco que mis telarañas son muy resistentes también al calor-Comento Bu con gran orgullo.
-Menos mal que te tenemos, que sería de nosotros sin ti.-Le dio las gracias Iren
-Seguro que seguiríamos siendo unos aracno-fóbicos, ¿pero lo de pensar no habéis cambiado o que?-El listo de Izkin (tono sarcasmo)
-¿Bueno genio de que estás hablando ahora?-Iren aun más sarcástica, la verdad que día tras día me gusta más la chavala.
-Haber, ¿para que cojones queremos pasar el jodido cráter de lado a lado? Lo sorteamos y listo, damos un rodeo y no tenemos por que jugarnos la vida, ¿o lo que quieres es que el héroe ese venga a rescatarte?-La verdad que el Zikin digo… el Izkin tiene razón, que parece que Iren quiere que venga el héroe molón a rescatarla y eso que no es ninguna damisela frágil en apuros… bueno vale en lo primero también tiene razón. Jodido Friki.
-“Sálvame o Ur, sálvame y llévame en tus poderosos brazos”-Grito Izkin con tono de chica que casualmente le salía muy bien. Haber esa doble vida que tiene por las noches…Si alguien ha conocido a Izkina envíe un e-mail a azkarrra@yahoo.es.
¡DONG!
Si ese sonido de campana era la cabeza de Izkin chocando con una roca de magma ya dura, el comentario no le sentó muy bien a Iren.
Pues NO PASO NADA mientras bordeaban el volcán, bueno, sí, paso que Bu una vez más tuvo que cargar con el cuerpo inconsciente de Izkin. Y todo lo que sube tiene que bajar, se pusieron a bajar ahora el volcán por la otra cara en dirección a su destino y FIN…

…que no, ¿como va acabar mi obra maestra así, sin ningún final ni nada? Si estamos a nada de entrar en la saga del melocotón, Sí es que se me va ocurriendo sobre la marcha y estaba escuchando una canción sobre un melocotón y al final lo he puesto. Lo que no tengo ni idea es de lo que va pasar, cualquiera puede decir “este seguro que tiene a saco de cosas escritas en un papel” y una mierda. Yo molo mucho por que lo pongo directamente del cerebro. Sí, es verdad que a veces cito cosas de libros, series o películas pero hay que saber citarlos bien si no queda todo hecho una chapuza y saber muy bien que poner. Por ejemplo si ahora pongo “Cortemos el cable azul-¡Como que el azul si acabas de decir el rojo!-¿Dije el rojo? Pues era el azul, voy a cortarlo… ¿Rog?-¡Que!-¿No echarás esto de menos cuando te jubiles? (risa cabrona)-(suspiro gruñón). //Corta el cable azul el contador a toda ostia y ellos tranquilos// -Rog-Que-¡Coge al gato!- ¿Que coja al gato? No me… ¡¡¡¡Apártense!!!!// BOUMMM y un edificio a tomar por culo” Y a Mel Gibson en esa peli Martin Riggs solo se le ocurre decir “casi una gatástrofe”… pedazo peliculón y quien crea que tiene toque irónico, señor se acaba de ganar a un poderosos enemigo.

martes, 7 de abril de 2009

Izkin... Capítulo 16: Raza: Jabalí humanoide gigante. Estado: Extinto

-¡Buscar a ese mal nacido!- Grito el jefe jabalí 
-Iren aprovecha ahora, dales las del pulpo que están distraídos.
Pero Iren no se movía, estaba buscando a Ur con la mirada, sin perder tiempo Izkin viendo que Iren no haría nada le empezó a hablar a Bu.
-Vamos Bu, que no se puede confiar en ella, no podemos hacer nada de nada si el capullo armado ese nos vuelve a apuntar. Quítale el arma de un telarañazo.
Y a eso iba el arañón pero…
¡Bang!
Balazo en todo el costado a la araña que cayó malherida. 
-¡¡Puta maricona cerda de mierda!!-Ur apareció detrás de jefe-cerdo. Este le disparó una ráfaga de balas, pero le atravesaban como si fuera una figura de agua, momento que aprovechó Iren para desarmarlo de una patada y acto seguido todo fue sangre y gritos de terror, quien iba a decir que un balazo a una araña preocuparía a Iren, incluso Izkin sin tener ni la más minima idea de pelear saltó sobre un cerdo mordiéndole la oreja, que se la arrancó de cuajo. 
La imagen de Ur seguía impasible como si no hubiera pasado nada, mientras Bu aunque pareciera mentira se puso en pie.
-Jo, que susto me ha dado, creía que me había matado.- Aunque sangraba bastante de la herida, parecía limpia y con su tela multiusos se la tapo como si fuera una venda.
-¡Joder! ¿Tú dices que te has asustado y nosotros que? Te has quedado inmóvil, como si te hubiera matado, ¡no me jodas cabronazo!-Eso si Izkin pese a las palabras se le veía más aliviado.
- No esperaba que os lo hubierais tomado tan mal, Iren parecía que se volvía loca y eso que le dan asco las arañas, no Iren?
Nada la otra estaba medio llorando hasta que vio a Ur y fue hacia él
-Gracias a ti hemos podido con ellos otra vez y salvado la vida a nuestro amigo. Como puedo darte las gra…-Y Ur se deshizo, no llegó a tocarla Iren y el héroe molón se había esfumado.
-Tranquila, seguro que diría algo del tipo “no es nada”- Le dijo Izkin a Iren.
-Pero no se, algo raro pasa con ese hombre.-Comento Bu a los otros dos.
-¿A que te refieres?- Al unísono preguntaron Izkin e Iren.
-No se, cuando perdía la consciencia algo raro escuche y luego él ni se ha movido, ha dicho una frase ha recibido una ráfaga de tiros que no le han afectado como si no estuviera allí y a dejado que tú- señalando a Iren- te encargaras de reducirlo, no se algo me huele raro ahí.
-Anda, ahora resulta que el arácnido educado es en realidad el arácnido detective.
Fuera bromas Izkin, a mí también me huele raro y eso que soy el escritor, pero no se igual que al arañón también hay algo que se me escapa.
-Pero no digas bobadas, ¿como va haber algo raro en ello?
Mierda Izkin te deje bien clarito que no charlarais con migo, tú y tus coleguillas estáis en un mundo aparte de este y se supone que no me oís, además es un gag que ya hemos usado, y queda mal repetirlo.
Tonterías aparte, la araña estaba herida, superficial pero herida, haber que os pensáis, ¿sí os pegan un tiro en la pierna sin que rompa ninguna vena importante o tendón y lo atraviese limpiamente no duele o que? Además tenían mucha carne que zampar, por cierto el grupo de jabalíes digamos que se extinguió, mientras reponía fuerzas Bu y los demás, se quedaron parados un tiempo, zampando cerdo y hablando Bu sobre lo extraño de Ur aunque sin mucho caso por parte de ellos dos.

domingo, 5 de abril de 2009

Izkin ... Capítulo 15: El retorno de las “Mariconas cerdas de mierda”

Después de esa última aventura nuestros protagonistas ganaron algo de peso, sí es normal mira que zamparse entre 3 y aunque uno fuera una araña gigante 10 cerdos de dos metros es carne. Ni siquiera colgaron alguna pata haber si se curaba y se zamparan jamoncito.
Tres días tardaron los muy glotones en volver a ponerse en movimiento, pero la nueva novedad era lo pesada que estaba Iren, ya no estaba de mala ostia pero es que no se callaba ni debajo del agua. Es más al parecer se puso a beber y se le oía decir “Glupglugluglup”. ¿Y por qué pasaba esto? Parece que Ur le caló muy hondo a la muchacha.
-¿Y sabéis que más sobre Ur? A parte de ser muy guapo, muy fuerte y muy buena persona, creo que su color favorito es el azul y…
-¿Oye Bu no podemos amordazarla atarla y llevarla encima de ti? – susurro Izkin
-Si hiciera eso… tú no has pensado en las consecuencias.
En ese momento la imaginación de Izkin se puso en marcha (si rara vez su cerebro funciona, esta es una de esas raras ocasiones, apuntar todos este momento histórico) e imagino a Iren desatándose y dándoles una paliza a los dos. Le llegó a su cerebro imágenes de Bu con todas las piernas rotas y babeando de la boca y luego su propio cuerpo sin manos ni pies y con un parche en un ojo.
-Vale, vale. Me has convencido, pero algo tendremos que hacer para que se calle.
¡Flup! 
Pues eso que la araña se las sabía todas, aunque fuera educado en las más estrictas de las escuelas, se sabía trucos para parecer educado sin serlo y un truco era echar un poco de su mejunje arañil sobre los oídos para taponarlos. Así aguantaron la chapa sobre el superhéroe molón con leotardos azules. 
Pero dejándonos de payasadas, el jefe de los jabalíes humanoides estaba recuperando fuerzas con los pocos hombres-jabalíes que quedaban. El pobre hombre solo quería conseguir comida y dinero y se encontró con cantidad de huesos rotos, entre ellos su cuerno, y si antes eran una veintena ahora apenas quedaba la mitad. Coño sí el tío apenas podía moverse cuando oyó la voz de Iren hablando sobre Ur a sus 2 amigos que en ese momento no oían un pimiento. “Esta es la mía” pensó y… 
-¡Hombres, ahora que no está ese cabronazo, vamos a por ellos! ¡¡VENGANZA!!
Rodearon al trío en cuestión de segundos. Los pobres aún con cardenales y vendas, sabían que sus rivales eran duros que además se habían comido a sus compañeros. Eso es valentía señores, esa lucha para vengar a sus camaradas caídos. 
Los dos sordos se quitaron los tapones viendo lo que pasaba entonces…
-¿Qué es eso? ¿No serán tapones verdad? ¿Osease no oíais nada?
En ese momento un jabalí atacó y sin ni siquiera mirarlo Iren le dio un puño con lo que el pobre bicho salió volando, entonces el jefe grito…
-Estaos quietos o usamos el cañón contra vosotros.
-¿Pero de que coño vais? ¿Me ignorabais todo el rato?-Iren cada vez más enfadada gritaba a sus compañeros.
-Está bien, ¡disparar el cañón!
Y el disparo del cañón fue de risa, se escucho un “Plof” y la bala simplemente salió del cañón sin ningún tipo de fuerza.
-Que raro, con este cañón sepultamos al piltrafa ese.
-¡Jefe la pólvora está mojada!
-¿Que? ¡No, otra vez no, el cabronazo ese NOOO!
-¿Ur? ¿Dónde, donde? –Iren que había cambiado de furiosa a amable en décimas.

miércoles, 1 de abril de 2009

Izkin J. Astra en el mundo comosellame (Capítulo 14: El poderoso Ur)

Los jabalíes gigantes atacaban con todo, con la boca abierta por si le cazaban a su rival ya de paso le clavaran los piños, pero no llegaban en ningún momento a su altura, Ur era muy rápido y apuntaba muy bien, esos chorros (¡parecidos a los que se usan para cortar el metal!) acababan con los jabalíes uno tras otro, caían al suelo completamente noqueados.
-Este es un héroe de verdad, guau.- Exclama Bu de asombro.
-Si- No podía decir nada más Iren.
Todos cayeron menos el jefe, con la metralleta automática que tenia y le pego un balazo a Ur, que salpico su sangre por todos lados…
-¡No!- Gritaron Bu e Iren a la vez.
… ¿Sangre? No era mas bien agua, y lo que se suponía era el cuerpo de Ur se había convertido en una figura de agua sonriente. Se deshizo al momento y…
-Donde estas cabronazo que has acabado con todos mis hombres, ¡Donde!
-¿Hombres? Dirás “mariconas cerdas”. – Estaba justamente detrás del jefe jabalí humano que se dio la vuelta rápidamente y le disparó o eso intentó. Pero no salía nada, la pólvora estaba mojada. 
-¡!- Acojonado el cerdo con cuerno cuando derrepente un chorro mucho mayor que los anteriores le alcanza el cuerno y se lo arranca de cuajo. El bicho se retuerce de dolor, es normal, un cuerno gordo y grande arrancarlo de cuajo tiene que doler un huevo.
-Ahora si que estás preciosa- Bromeo Ur y acto seguido otra vez ese chorro gordo aparece dándole en la mandíbula del jefe-jabalí-sin cuerno-humanoide que lo deja destrozado.
Algunos de los hombres de esté se han recuperado un poco y miran con miedo pero a la vez furioso a Ur, pero no se tienen que preocupar por él, Iren y Bu se encargaron de ellos con unas palizas muy salvajes. Por favor ese horror otra vez, Iren completamente encorelizada sacudiendo una y otra vez los cuerpos de los maltrechos bichos mientras que al no ser humanos parecía que a Bu no le importaba comerse alguno por que los atrapaba con su telaraña, los hacía capullos y se comió alguno.
-Tienes que probar alguno Iren esto esta de muerte, sabe como a costillas de cerdo.
-Guárdanos alguno para luego. 
Algunos consiguieron escapar, se llevaron a su jefe y desaparecieron. Ur había desaparecido, parece que decepciono a Iren que se haya ido. Pero derrepente…
-¡Mierda, Izkin sigue debajo de esas rocas!- Y a toda ostia fueron hacia donde se había producido el derrumbe. 
Al llegar allí vieron como las rocas estaban destrozadas e Izkin se arrastraba entre ellas queriendo salir de allí. Bu le echo una tela y lo saco de allí. Empezó a toser.
-¡Izkin!, ¡Si estas vivo!
-Sí, joder, creía que no lo contaba, prefiero los bichos bolas antes que los cerdos gigante esos, ¡Tjo tjo tjo!- Casi ni podía hablar.
-Sabes Izkin, hemos conocido a un héroe de verdad, Parecía muy fuerte y de confianza.
-Sí es el quien ha destrozado todas las rocas que tenía encima que me aplastaba, un tal Urtz o algo por el estilo, un verdadero capullo más. Me ha quitado las rocas pero me ha dejado enterrado debajo de un montón de grava.
-Se llama Ur y nos ha salvado de esos cerdos, que por cierto están muy buenos, tenemos alguno atrapado por si los quieres probar.
-Venga que ya tengo hambre, por lo menos ya no estas enfadada ¿no?
Y se zamparon unos cerdos de esos que estaban de muerte por muy humanoide que fuera el cerdo es cerdo. Al final continuaron con su viaje.